Cada temporada, nuestros visitantes nos piden productos y servicios nuevos, que hagan de su estadía una experiencia inolvidable. Ya no es suficiente tener un lindo hotel, cumplir los horarios de las excursiones o vender una artesanía. Nuestros clientes piden algo más: que su estadía en el destino sea algo memorable.

Para responder a lo que nos piden, muchas veces invertimos grandes sumas de tiempo y dinero para mejorar productos y servicios, pero no logramos encantar a nuestros clientes. ¿Cómo podemos innovar en nuestras empresas para hacer única la experiencia de turistas y excursionistas? Una alternativa es incorporar nuestros relatos locales.

Cuando contamos nuestras historias a los que nos visitan, lo que estamos haciendo es comunicar un relato. Estos relatos son narraciones extensas o pequeñas, reales o irreales, de incidentes que tienen significación para la comunidad o un grupo de personas.